DINERO SUIZO, CORRUPCIÓN ESPAÑOLA (Página nº 1586)

El patriotismo español y el nacionalismo catalán resulta ahora que son suizos porque el dinero, el negro, el fugado, se refugia entre valles alpinos y se pone a resguardo del fisco español. Algunos de los personajes, eso sí, rentabilizan y han rentabilizado sobremanera su discurso político patriotero pero su verdadera patria es el dinero y las banderitas la escenografía para confundir.

Se suceden las noticias de Bárcenas, de los Pujols, pero también de los cientos de nombres a resguardo en la famosa lista de españoles con cuentas en Suiza que desde el poder no se quiere desvelar. Como tampoco de los acogidos a esa vergüenza de amnistía fiscal a cambio de un dos por ciento cuando a la inmensa mayoría de trabajadores se les retiene entre un 10 y un 25 por ciento de sus ingresos.

La corrupción también es eso, el silencio, la opacidad, la condescendencia. Está en nosotros ya con una naturalidad aplastante que sólo nos escandaliza de forma inocua, sin consecuencias ni reacciones necesarias. Incluso nos conforma que se reduzcan, los casos más visibles, al terreno político para no querer pensar que en nuestro país hay demasiados nichos de corrupción incluso allende del mundo político.

Mantengo, eso sí, que las corrupciones políticas son las peores porque, en el fondo, a los gestores políticos encomendamos la elaboración de leyes y la puesta en marcha de mecanismos para combatir la corrupción y sólo nos devuelven decepciones e incompetencias.

A este paso va a tener razón Forges, con su viñeta de hoy en El País:

Añadida: Vineta de JRMora, hoy, en lainformacion.com: