Las leyes son buenas cuando son justas, equitativas y nos igualan a todos. Mientras no sea así difícilmente se puede creer en una justicia justa.
A partir de ahí pueden esperar sentados a que Hernández Moltó, Rodrigo Rato o Narcís Serra paguen por sus horrendas gestiones y su destrozo patrimonial del dinero de muchos utilizado políticamente y enormemente bien pagado. Ninguno pisará la cárcel, aunque me consta que gran parte de los españoles desearían verlos allí, tras las rejas, para que pagarán por su incapacidad y su disparatada presidencia que ha causado tantos estragos en los ahorradores de sus respectivas entidades, y a los que se les colocó allí exclusivamente por decisión política y nunca por su experiencia ni formación empresarial o gestora. Y que conste que nombro estos tres por ser los más conocidos aunque la lista de gestores políticos de estas entidades es larga y abrumadoramente descriptiva de la clase de criterios que servían para aupar a estos valeparatodo políticos de modo que sirvieran a los intereses políticos de quienes los designaban.
Esperen sentados, de la misma manera, a que paguen por su responsabilidad los gobernantes que los colocaron allí con la sórdida intención de instrumentalizar esas entidades para ponerlas al servicio de sus intereses políticos.
Ya saben, la legislación española ya se ha ocupado de que ni unos ni otros corran peligro de pagar por sus responsabilidades y nada impedirá que los vuelvan a colocar en espléndidos lugares donde puedan seguir influyendo desde la política en favor de esos mismos gobernantes u otros.
Mientras tanto, ya saben, toca encarcelar manifestantes. ¡Qué fácil les es señalarlos, juzgarlos y condenarlos!, ¡qué fácil endurecer las leyes para perseguirlos!
Evidentemente no juzgo que sean culpables o inocentes, allá cada cual lo que hiciera, y si merecen condena o no pues que lo decuidan los jueces, pero veo infinitamente más grave lo de Moltó, Rato o Serra que lo de esta gente y no se ve, de ninguna manera, que ahí haya equilibrio, proporción. Tampoco, por supuesto, se ve legislar para conseguir que estos buitres de cuello blanco y carnet sí sean responsables penales de hundir un banco, una caja, una empresa pública o un ayuntamiento. No, eso ni lo hacen ni se les pasa por la cabeza, porque están muy ocupados en legislar el Orden Público y reprimir a esos peligrosísimos manifestantes y no pueden ocuparse de los que tienen la "mala suerte", "el infortunio", de quebrar entidades financieras regionales por alimentar los turbios intereses de los gobernantes que los habían colocado para eso mismo, y eso a pesar de que cueste miles de millones de euros a las arcas públicas.
Ésta puede que sea la España que algunos quieran pero, estoy convencido, que no es la que la inmensa mayoría desea. ¿Quieran regeneración democrática?, ¡empiecen por legislar para que estos individuos paguen muy caros sus actos y lo mismo se evitan tantas manifestaciones y, de paso, ensañarse con ellos mientras permiten que los Serra, Rato y Moltó, entre muchos, queden impunes!
Postdata: ¡Y si tienen coj...., con perdón, digan que esto que pido es de izquierdas!
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