Después de leer las declaraciones del concejal de Medio Ambiente diciendo que no hay episodio de contaminación alguna y dando una explicación que a mí para nada me cuadraba después de seguir el hilo del foro de embalses con fotos y opiniones señalando el color y olor llamativamente anormales que hacían sospechar de algún episodio contaminante y que se producían antes de las balsas que Gregorio citaba dejé, pese a todo, cierto margen a la duda.
Después de escuchar otras declaraciones, las del director del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, Carlos Ruiz de la Hermosa, tan poco propenso a mojarse en estas cuestiones, hablar claramente de contaminación, de peces muertos y de riesgo para el parque, y tras darme un paseo por la zona, me quedaba absolutamente claro que tal vertido se había producido y que, de nuevo, el Parque nacional de Las Tablas de Daimiel tenía que soportar un nuevo impacto de consecuencias aún difícilmente evaluables.
Llegados a este punto, si sobre la gestión del Azuer no tiene competencia alguna el Ayuntamiento de Daimiel y el supuesto vertido tampoco procede de ninguna empresa ubicada en la localidad, pues no se hace referencia alguna a tal circunstancia, me hago una pregunta:
¿A qué viene ese empeño de Gregorio Díaz del Campo en negar la mínima posibilidad de vertido que se contradice con el resto de testimonios recogidos, algunos como el propio director del espacio protegido y que creo que cuenta con información precisa y con competencia profesional para hacer tales afirmaciones?
Es más, como digo el director del parque no es muy dado a declaraciones acusatorias y ni tan siquiera a entrar en estos temas en los medios y si lo ha hecho debe ser impelido por la gravedad de lo ocurrido y porque de verdad hay un riesgo evidente y un efecto a corto plazo que debe saberse y denunciarse públicamente, y eso me convence mucho más de la impostura de Gregorio que o no sabe o no quiere saber de la naturaleza del vertido contaminante empeñándose en negarlo. ¿Por qué? No soy capaz de descifrarlo pero me gustaría saber que lleva a esa defensa a ultranza.
Eso sí, la realidad es que de nuevo Daimiel, Las Tablas, andan por medio para no buenas noticias...hasta el próximo episodio que, visto lo visto, sí o sí, ocurrirá.