En política, sobre todo en elecciones, los sesudos equipos del candidato no suelen dar puntada sin hilo, aunque a veces dicho hilo pueda ser de la peor calidad y se rompa a la menor maniobra. Se trata de un juego de estrategas, un ajedrez político que trata de bucear en los posibles flancos para lanzar mensajes tanto favorables como descalificatorios del rival, y por ahí puede entenderse, entre otras cosas, lo de la "pinza" que los malvados PP, Ciudadanos y Podemos han urdido contra el PSOE.
Para ello, claro, necesitaban ayuda exterior y por eso recurrir a Felipe González, ajeno al equipo del candidato y "veedor" de pinzas a doquier, o a los siempre comprometidos Iñaki Gabilondo, Carles Francino, la Cadena Ser o el Diario El País era el primer paso para lanzar el mensaje conspiratorio que después comenzarían a papagayear el propio Sánchez, Luena, Hernando, etc...
Saben que es mentira, como saben sus propias mentiras los equipos de campaña de cada uno de los partidos cuando lanzan sus zanahorias en forma parecida. Pero la explicación suele ser más sencilla y se mueve a golpe de encuestas, sondeos de opinión y pulso en la calle. Y el PSOE se ha percatado de que el verdadero caladero de votos a "robar" se encuentra bajo ese concepto que abarcaba el propio partido socialista y que iba entre un centro, centro izquierda e izquierda con ínfulas progresistas, y eso, con la aparición de partidos como Ciudadanos o Podemos amenaza con poder reducir a la semi-nada a un PSOE que no ha sabido gestionar la situación, entre otras cosas por sus propios grandes errores.
Esa es la pinza y no otra, que el partido de Rivera trata de crecer por ambos lados pero ve más flaqueza por la izquierda y trata de explotarlo en su favor y que Iglesias, que ha visto esa misma flaqueza, sabe que solo puede crecer a costa de los decepcionados del PSOE y los indecisos de izquierda y Pedro Sánchez anda en medio y comienza a notar el ahogo que lanzan las encuestas. ¿Que eso le viene bien al PP? Pues resulta evidente que salvo que le coman terreno al Partido Popular todo le viene bien, ya que por la derecha-derecha no corre riesgo alguno.
Por eso Ciudadanos juega a todo haciendo guiños a ambos lados mientras patrimonializa el centro político, Podemos habla de remontada y usa la idea fuerza de que el PSOE es uno cuando está en la oposición y otro cuando gobierna para alimentar la historia de que ayudarle a gobernar votándoles termina por ser votar de derechas y PP juega con la idea de que todos están contra ellos y representan lo mismo, ese tipo de políticas, nos dicen, que nos volverán a hundir en la miseria.
Todo es puro juego, pura estrategia. No hay pinza ni conspiración que valga. Solo intereses cruzados que ayudan a soltar estas tontunas por si algunos pican. Y aunque titule "o cómo se les va la idem" sé perfectamente que a nadie se le ha ido la pinza, que todos saben a lo que juegan, que la mentira es una de las bellas artes políticas y que juegan al engaño porque está en su propia naturaleza, aunque tengan que recurrir, en este caso, a peones ilustres como Felipe, Gabilondo, Francino o los medios de cabecera. Si lo hacen los demás ¿cómo no iban a hacerlo quienes lo han hecho siempre?
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