Cada vez que abre la boca sube el pan. Yo no sé si se trata de un tipo inteligente lleno de estupideces o de un estúpido que pasa por inteligente.
La última ha sido afirmar que la selectividad no funciona porque aprueba el 94 por ciento de los estudiantes, un análisis tan simplista y digna de un necio que me hace preguntarme cuál es el mérito real de este individuo para haber conseguido ser ministro y para convencerme, una vez más, que la mediocridad es el rasgo común que retrata a la mayoría de los que lo han sido en los últimos gobiernos.
Si no, entendería que los centros educativos actúan como filtros radicales porque gustan presumir de su alto número de aprobados en la prueba de acceso a la Universidad y, por tanto, superar todas las condiciones para poder realizar dicha prueba no es tan sencillo. No se les regala nada y a cambio reciben el desprecio de este individuo, que infravalora el esfuerzo realizado para poder continuar sus estudios ya en la Universidad, pagando sus nuevas tasas y viendo que este tipo, como sus antecesores, no serán capaces de explicar por qué cuando obtengan sus títulos universitarios no encontrarán apenas opción de trabajar en sus especialidad elegida.
La educación española es un fracaso no por el esfuerzo de los estudiantes sino por la incompetencia de los políticos, como él, incapaces de escuchar a los que saben y de pactar medidas atrevidas y con sentido común en vez de someterlo todo al arbitrio ideológico y la ocurrencia personal.
Y encima, en su caso, se ha instalado en el ministerio para malmeter, enfrentar, despreciar y destruir cualquier posibilidad de solucionar el problema educativo. Es un dinamitador, un personaje prescindible cuya única unanimidad que va a conseguir es el de los que abominan de él, sus medidas, sus declaraciones y sus salidas de tono. Una "wert-güenza de ministro" que terminará por no representarnos a nadie del ámbito educativo.
Enlace:
http://noticias.lainformacion.com/educacion/universidad/el-ministro-de-cultura-tiene-claro-que-la-selectividad-no-funciona-porque-la-aprueba-el-94-de-alumnos_Mr9smklZOpGZ4p1se4rf37/
Este tipejo como el Sr. Marín harán, en parte, lo que la sociedad y más concretamente el colectivo educativo les consintamos. ¿Para cuándo una actividad docente a reglamento y que se enteren de una vez del trabajo imprescindible,no remunerado ni reconocido que realizamos?
ResponderEliminarSin perjudicar notablemente a los alumnos nos quedan algunas armas que podrían poner en evidencia y en jaque la estulticia de esta gente.
¡Hombre! No me compares a este personajillo con Ángel Gabilondo.
No trato de comparar, los igualo no en su comportamiento público sino en su ineficacia para ofrecer soluciones reales y plantear políticas educativas sin dictados ideológicos y contando con la comunidad educativa para abordar las posibles soluciones.
EliminarEste individuo es desquiciante y en eso no tiene parangón con ningún otro de los ministros que he conocido en 26 años de docencia.
Como eres joven no tuviste la suerte de padecer a Julio Rodríguez que tuvo la genial idea de querer hacer coincidir el curso escolar universitario con el año natural (de ahí que su reforma se conociera como el calendario Juliano)Afortunadamente fue ministro de junio del 73 a enero del 74-lo que supuso la pérdida de un curso académico a los universitarios de entonces. El actual ministro puede llegar a superarlo con sus nefasatas decisiones y reformas.
EliminarLo que es increible es que una y otra legislatura jueguen con al sistema educativo y que en vez de progresar, cada vez vaya a peor. Ahora ya hasta los profesionales de la educación, somos delicuentes por haber hecho una carrera y aprobado unas oposiciones que nos haya dado un trabajo fijo, por lo mismo no es de extrañar que el que apruebe la selectividad un 94% de alumnos sea un problema para los políticos.
ResponderEliminar¿ Qué pensaran esos profesores y maestros que estan en política, son tan necios que consienten que sus compañeros de partido les denigren?, en fín España va bien, tenemos lo que queremos.
Yo no acabo de creerme que todo lo que se dice que ha dicho sea cierto. A veces los medios sacan las cosas de contexto o solamente publican la frase más llamativa.
ResponderEliminarAyer leía, por ejemplo, que según sus palabras: en la reforma que pretende llevar a cabo, hará un esfuerzo de diálogo con la comunidad educativa y la sociedad en general, pero que si el consenso no parece posible la reforma se realizará de todas formas.
Es decir que vamos a dialogar pero que de todas formas se hará lo que yo diga. Estas palabras sólo puede decirlas un déspota, un egocéntrico, un intransigente y soberbio, poco dispuesto desde luego a escuchar, dialogar y encontrar soluciones consensuadas. Y aunque este señor fuera así, dudo que hiciera estas declaraciones en público, porque entonces también denostaría ser estúpido. Luego quiero imaginar que lo que se dice es sólo parcialmente cierto. Y desde luego de no ser así, podemos contar con que este señor va a acabar definitivamente con la educación pública, al menos tal como la conocemos, o la hoemos conocido, y el sistema público acabará siendo una pobre alternativa para los pobres que demuestren ser muy inteligentes y consigan alguna beca, porque los ricos seguirán estudiando y teniendo más oportunidades, aunque sean tontos, pero puedan pagarse su carrera
¿Lo pones en duda? Si quieres, hacemos apuestas sobre el tiempo que tardarán en ser realidad tus temores.
EliminarCon este "señor" y sobre todo su presidente-que es el verdadero responsable- la realidad va a superarcon creces a cualquier ilusión.
A la Cospe tampoco es que la quieran mucho por su labor en Educación.
ResponderEliminarVídeo de una nueva pitada en Almagro, ayer mismo:
http://www.youtube.com/watch?v=z9fqMxWcFLo