LES DIERON LA DEL PULPO (Página nº 420)

Al menguado grupo municipal socialista le dieron la del pulpo, un brazado de collejas dialécticas desde su derecha e izquierda a cuenta de la moción sobre el colegio San Isidro. Y eso pese a que Ana Marchán, que hizo una buena exposición y va ganando protagonismo, adoptó casi siempre un tono correcto y conciliador. Pero claro, guste o no, existe memoria y tanto IU como PP la sacaron a pasear dando rienda suelta a su crítica.

La de ayer era una de esas mociones que en buena lógica debieran haber salido adelante, básicamente por la necesidad de dar solución a una situación que exige un esfuerzo común y consensuado para, a su manera, presionar a la administración. Pero al plantearla el PSOE e introducir en su redacción algún puyazo partidista ya nació condenada. Oportunista fue casi el más bonito de los adjetivos que recibió y tanto Galo, y su grupo apoyó la moción, como Mª Dolores, que desde el primer segundo ya mostró su posición de no respaldarla, se lanzaron a ese ejercicio de memoria que tenía, además, por uno y otro, collejas multidireccionales sobre legislaturas de silencio y de no hacer nada o de quererse apuntar todos los tantos. Pero, al final, los golpes, casi todos, llovían sobre los socialistas, con barredas, emumasas, abandonos, oportunismos, faltas de diligencia y otras hierbas azotadoras que soportaron con cierto aguante y dignidad.

Al final, sin embargo, lo importante es que la moción se desestimó, que será complicado ver el inicio de las obras dentro de esta legislatura, lo cual, para la comunidad escolar de San Isidro es un palo en toda regla sumado a palos anteriores, y que al PSOE de Daimiel le han encontrado un flanco donde golpearle sin mucha piedad a cuenta de lo que pudo haber hecho y no hizo y que tendrá nuevas entregas.

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