La industria cultural está obsoleta, anclada en un modelo absurdo que sólo pretende exprimir el producto y quedarse con el mayor de los beneficios. Pero en muchos casos los ciudadanos pagamos varias veces ese producto, parcial o totalmente, a través del canon digital, ya eliminado hace unos días, las subvenciones a teatros o películas y comprándolo directamente. En todo caso para seguir alimentando a la bestia tragaldabas que tanto pelean por sus derechos.
Pues bien, si quieren ser industria que lo sean con todas las consecuencias, sin financiación pública, arriesgando de sus bolsillos y vendiendo el producto por los propios méritos de la obra. Y luego que se hable del verdadero valor de lo hecho pues muchas de esas obras y películas no son capaces ni de estrenarse ni encontrar público.
Y ya que me he desahogado os quiero dejar aquí enlazada la última entrada del blog "Kurioso" que bajo el título de "#ComparteCultura" ofrece, entre otras cosas, una lista de contenidos culturales gratuitos accesible desde la red, ¡ imperdible !
Guardalá en favoritos o búscala en este mismo Daimiel Diario, en la etiqueta GRATUITO:
http://kurioso.es/2012/01/09/compartecultura/
¡No a la Ley Sinde ni secuelas!
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¡Estupendo enlace!
ResponderEliminarGRACIAS