Según la declaración de Cristina Maestre en los Presupuestos Generales de Castilla-La Mancha todo mengua menos el dinero destinado a pagar altos cargos y puestos de confianza:
“la indignación y la vergüenza que supone comprobar cómo, en los Presupuestos de Castilla-La Mancha para el año próximo, la única partida que sube, además de la que se destina a pagar la deuda que ya ha generado Cospedal, es la que dedica a pagar a los altos cargos y el personal puesto por ella misma a dedo, que crece un 190 por ciento en el caso de la Presidencia desde que llegó al Gobierno” (...)
“mientras ha despedido a más de 7.000 profesores y médicos, mientras ha recortado casi 3.000 millones de euros el gasto en Sanidad, Educación y Servicios Sociales, mientras les baja el sueldo a miles de empleados públicos, mientras ha recortado el 75 por ciento el presupuesto para empleo desde que empezó a gobernar, ha crecido un 190 por ciento la partida para pagar a los altos cargos y el personal de libre designación de la Presidencia de Castilla-La Mancha”.
Yo no conozco el detalle de dichos presupuestos pero si esto es verdad entonces comparto la indignación y la vergüenza.
Los economistas advierten que el estado actual de funcionamiento de las administraciones públicas es el verdadero lastre para combatir la deuda y propiciar la recuperación, y sin embargo nos encontramos con noticias como estas, donde queda patente que no solo no recortan en cargos públicos sino que dan carta blanca para proseguir la colocación de peones y bocas agradecidas sobredimensionando dichas administraciones. Y si ahora el ejemplo es Castilla-La Mancha ha menudo aparecen noticias en el mismo sentido en otras administraciones del país. Los partidos se han apropiado de la democracia y no son siquiera capaces de dar muestras de ejemplaridad, algo que serviría para que los ciudadanos visualizaran el sacrificio que se pide a todos y que ahora solo ven en ellos mismos porque los políticos, del signo que sean, viven en otro mundo, siempre a costa del presupuesto, embelesados en exprimir la teta presupuestaria según para qué y quienes, incapaces de sofocar ese cáncer de gasto que son las administraciones públicas mientras, eso sí, suben impuestos, bajan sueldos, eliminan servicios, establecen repagos y nos culpan acusándonos de vivir por encima de nuestras posibilidades.
Si la noticia es cierta sepan de una vez quienes son los que, de verdad, viven muy por encima de las posibilidades de sus ciudadanos.
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Entre la hora y media para misa y lo del 190% de subida para "su tribu" ... ¡apañaos vamos!.
ResponderEliminarY ahora vamos y la votamos.
Mi pregunta es ¿como se para todo esto? Si es verdad lo del 190%. Mientras la universidad, la sanidad.... Peligra.
ResponderEliminarDa igual que esten unos u otros, los sindicatos......que vergüenza