viernes, 23 de marzo de 2012

RESPONDIENDO AL COMENTARIO SOBRE LIBROS DE TEXTO DE ELABORACIÓN PROPIA (Página nº 857)

Sería muy prolijo contestar a esta pregunta que se hace en el comentario si no pongo un simple SÍ y lo cierto es que ya es bastante complicado sacar proyectos en ciclos aislados y mucho más en colegios enteros como para pretender proyectos globales a nivel de localidad. El comentario y la pregunta eran estas:

"Yo he conocido compañeros que trabajaban sin libro, elaborando materiales, y en el fondo ese debiera ser el camino" LLevas mucha razón en esto Totem. ¿Porqué no se elaboran materiales conjuntos en colaboración de todos los colegios de la localidad? Repartiendo el trabajo entre los docentes y mandando a las editoriales al carajo."


Pero siendo una iniciativa aconsejable y extensible a todo tipo de centros, al menos al nivel citado de ciclos o de todo un centro, hay que reconocer que se encuentra con considerables obstáculos. Algunos ya los mencioné en otro comentario a esa entrada:

Esto nunca puede ser una iniciativa aislada sino de un equipo de ciclo o todo un equipo docente y eso significa que todos los integrantes deben compartir la necesidad de hacerlo porque requiere de mucho trabajo y compromiso. A veces el proceso lleva dos o tres años, trabajando unidad a unidad, para dar cuerpo a esos materiales y a la base metodológica que la sustenta, además claro de las revisiones posteriores tras evaluarlas y proponer mejoras, y en ocasiones los equipos no son tan estables. Además requieren de tiempo real en la organización del centro y eso suele chocar con la disponibilidad horaria, saturada de reuniones de todo tipo. Luego está, claro, la comodidad de unos libros de texto ya establecidos que, muchas veces, disuaden a muchos docentes de aventurarse en estos proyectos complejos y no siempre comprendidos por los padres por ese carácter experimental que conllevan.

Pero, indudablemente, sigo pensando que es una opción a tener en cuenta, una forma de personalizar los materiales, de dotarlos de mayor afinidad a los grupos reales y sus intereses y, por tanto, que resulten más útiles para lo que se pretende de ellos. Y aunque no se vislumbre como una alternativa poderosa espero que la tendencia cambie y sean, seamos, cada vez más los que intentemos poner en pié otros planteamientos no mediatizados por la estandarización de las editoriales.

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