"La envidia nos ceba. Si el vecino o el cuñao se compra un coche, nosotros otro más grande; si una casa, nosotros otra mejor. Así siempre, sin enterarnos que nos hemos hecho esclavos de comprar y comprar, y como nos lo ponían tan a güevo pues a entrampase hasta el cuello. Pero quien se hincha a comer luego caga fatal, y ahora toca cagar, cagar y mucho, y por eso ahora todo el mundo se queja. Mira yo, con tener un cacho de pan pa comer y una cama pa dormir voy aviao porque cuanto menos necesito mejor estoy y por eso a mí la crisis me la suda.
Que hemos comío sin hambre, por la puta envidia na más, y la envidia nos engorda, acuérdate que te lo he dicho, y ahora hay que pagar ese convite"
En ese momento pensé "primera clase de economía parda, de la de andar por casa", buen resumen a su manera de contar de lo que ha sucedido, pese a lo ordinario del lenguaje. Porque, en el fondo, le ampara la razón, hemos sucumbido, en general, a la envidia y ahondado en valores más mercantiles que personales. No vale ahora echarle toda la culpa a los bancos, que la tienen en buena parte, sino ser capaces de ejercer la autocrítica y comprender que no sólo somos las víctimas sino también los corresponsables de esta demencial carrera consumista y especulativa.
Por cierto, dejo la última viñeta de Eneko, publicada hoy mismo, y que me recuerda a otra de hace algún tiempo y de otro autor, porque contra la crisis siempre termina haciendo falta apretarse el cinturón. Pero, ¿cuántos agujeros?:
+/\+
Frase del día
ResponderEliminarTodas las buenas maneras tienen que principiar compartiendo alguna cosa con sencillez. Dos hombres tienen que compartir un paraguas; si no tienes un paraguas, tendrán por lo menos que compartir la lluvia, con todas sus ricas posibilidades de humor y de filosofía.
Gilbert Keith Chesterton (1874-1936) Escritor británico.