miércoles, 26 de octubre de 2011

SOBRE LOS DOCENTES DE LA PÚBLICA QUE LLEVAN A SUS HIJOS A LA CONCERTADA O LA PRIVADA (Página nº 382)

Continuando con mi contestación al tema sugerido en un reciente comentario quiero volver a precisar, antes de responder, que el derecho a poder elegir el tipo de centro al que quieres llevar a tus hijos prevalece ante todo lo demás y eso significa que no es discutible tal elección aunque de cara a la opinión pública llame la atención.

Cierto es que muchas veces ha salido el tema de docentes de la enseñanza pública que llevan a sus hijos a centros concertados o privados y casi siempre con la intención de reflejar la aparente contradicción. Admito que resulta chocante porque parecería que los propios docentes de la enseñanza pública tienen más confianza en la educación privada o semiprivada y eso parecería ir contra el prestigio de la enseñanza pública, pero incluso eso tendría matices:



  • Por ejemplo, la elección es voluntaria siempre pero si no eliges ese centro sólo en una situación extrema podrían asignártelo de oficio, y aunque no suele ocurrir existe la posibilidad. Conozco algún caso en otra localidad.

  • También puede ocurrir que el centro concertado/privado se encuentre más próximo que otro al domicilio y se quiera hacer prevalecer ese aspecto sobre otros.

  • Que el docente y su pareja tengan opiniones diferenciadas y se imponga finalmente la de esta última (el o ella) por cosas como haber sido antiguo alumno o sentir afinidad por el ideario de dicho centro.

  • Que esten convencidos de que un determinado centro concertado/privado puede ofrecerle más que los centros públicos existentes.

En mi caso siempre tuve claro que quería una educación pública para mi hija. Estoy convencido de que en Daimiel la educación pública no sólo no tienen nada que envidiar a la concertada sino que está en disposición de mejorarla sobradamente. ¿Por qué?



  • A mi modo de ver la selección del profesorado, globalmente, permite que en los centros públicos haya gente cuya experiencia laboral les ha llevado por centros de distintas tipologías, centros no graduados, unitarias, adultos, institutos, centros de pueblos y ciudades variadas que son una fuente de riqueza en experiencias y situaciones que mejoran al propio docente. Y conozco mayor número y proporción de docentes en la pública que poseen licenciaturas que complementan su formación profesional y se refleja en su acción docente.

  • En la elección de materiales curriculares prevalece el criterio del profesorado y se de centros concertados y privados donde se imponen las editoriales con las que trabajar y responde a intereses de la propiedad del centro.

  • En cuanto a recursos materiales e instalaciones hay de todo y no tantas diferencias entre públicos y privados y sólo dependería del momento de construcción de cada edificación. Los centros públicos cada vez ofertan mejores instalaciones y equipamientos que en nada desmerecen a los concertados. Aquí, es verdad, la privada suele llevar cierta ventaja.

En definitiva respeto la decisión de cualquier docente de la pública que apuesta por la privada o concertada para sus hijos pero no comparto el criterio. Y sí, llama la atención, y más cuando es raro lo contrario, profesores de la concertada o privada que lleven a sus hijos a la pública, pero es la decisión persnal y meditada de cada cual y por tanto respetable. Eso sí, para mí, insisto, en Daimiel, la mejor educación para mi hija la daba un centro público y esa fue mi elección.



1 comentario:

  1. Frase del día

    Lo que se les dé a los niños, los niños darán a la sociedad.

    Karl A. Menninger 1893-1990. Psiquiatra estadounidense.

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