martes, 22 de diciembre de 2015

EL OTRO "ANALÍS" - PODEMOS Y CIUDADANOS (Página nº 3402)

La irrupción de estas dos nuevas fuerzas ha sido potente aunque, al parecer, había quien esperaba resultados más demoledores. Para mí es casi un milagro que de la nada hayan alcanzado 109 diputados y acaparado más de un tercio de los votos emitidos en un sistema que casi desde el inicio, salvo aquella UCD, no daba espacio a otra cosa que el bipartidismo, entre otras cosas porque el diseño previo de la ley electoral favorecía clara y descaradamente a las mayorías y, de paso, a la representación nacionalista y despreciaba al resto.

Lo he dicho y lo reafirmo, Podemos es fruto de una respuesta social a las políticas del Partido Popular en estos cuatro años. Creó al "monstruo" y lo fue alimentando porque primero fueron las promesas convertidas en mentiras, luego la dureza de unos recortes discriminados porque castigaron, sobre todo, a las clases medias y a las más desfavorecidas, al tiempo por medidas de claro corte ideológico que lubricaba la mayoría absoluta y, como no, la hilera de escándalos de corrupción que nunca supieron y no sé si quisieron atajar contundentemente. Si a eso añadimos la capacidad de proyectarse políticamente de los dirigentes que capitalizaron los movimientos indignados y el uso de los medios de comunicación propios y ajenos pues resulta sencillo entender la eclosión.

Eso sí, 69 diputados entre aquí y allá es una cifra importante pero claramente insuficiente, y por eso estos estrategas formularon el mismo día 20 de diciembre unas condiciones inviables para posibles aliados lo que me da la certidumbre de que a Podemos sí le interesa especialmente una repetición, a corto plazo, de las elecciones porque tiene la convicción de que logrará mejorar sus resultados.

En cuanto a Ciudadanos se le acusa de un "souffle" electoral, de que subía mucho en las encuestas y al final se desmoronó bastante, pero son 40 diputados ni más ni menos. El problema es la indefinición y que todos lo vieran, sin embargo, como un "PP" pasado por chapa y pintura y no como un centro político real, y creo que en eso ha fallado la estrategia o, en el peor de los casos, se les han visto las costuras. Querer representar lo nuevo, la regeneración, y vincular su apariencia demasiado a quien representa lo contrario ha hecho que en el último momento algunos de sus posibles votantes hayan reculado.

Pero me da que Ciudadanos, aunque haya dicho lo contrario, sabe que en una nueva votación mejoraría resultados, que les ha faltado tiempo para convencer como alternativa y para seleccionar mejor sus candidatos, demasiado desconocidos algunos, mal elegidos otros por las prisas de completar representación en todas las provincias, que es un síndrome de Podemos también y en general de todo partido nuevo que en apenas dos, tres o cuatro años tienen que dar un salto a aspiraciones mayores.

Pese a la incertidumbre, al menos frente a la certidumbre del bipartidismo inmovilista, resulta una buena noticia que haya otras alternativas. Incluso aunque los resultados aboquen a una difícil política de pactos. El PP y el PSOE, con sus errores, sus escándalos y su conformismo interesado, han conseguido desestabilizar el sistema, pudrirlo, descomponerlo. Si ocho millones setecientos mil votantes han apostado por nuevas políticas es porque han conseguido hartar al personal, hacerles buscar otra cosa. La alternancia en el poder, si hubiese sido modélica en las formas, la ejecución, el desarrollo, hubiera durado siempre, pero prefirieron abusar del poder, tomar las instituciones para sus intereses, colocar peones a mansalva, imponer leyes eludiendo muchas veces los consensos, y ya muchos dijeron ¡basta! y por eso nos enfrentamos a este escenario. Culpar a los emergentes es un error, los responsables estaban antes...¡y ahí siguen!


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1 comentario:

  1. Lo que más me jodería es volver a aguantar otra vez el hartazgo que da la campaña de la propaganda electoral y los gastos que conlleva.

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