DECLARACIONES QUE SUENAN A IMPOSTADAS (Página nº 1037)

Puede que sean completamente sinceros al decirlas, que estén convencidos de lo que están diciendo, que hagan un ejercicio real de honestidad, y aunque yo no tengo por qué dudar de que eso les guíe y les mueva al decirlas sí que puedo afirmar que la sensación que dan es otra, que ese tipo de declaraciones suena a estandarizadas, a poco naturales, a discurso aprendido e impostado.

En general los políticos, cuando hablan como políticos, dicen las mismas cosas, cierran filas, hacen alardes y, cómo no, terminan sonando a corrección política y a oficialismo.

Por no irme muy lejos algunos ejemplos de esta semana:

Saturnino Salcedo, nuevo Secretario General del PSOE de Daimiel:

Que se hayan presentado dos candidaturas "es un buen índice de democracia interna", frase típica y tópica donde las haya y que siempre aparece cuando hay varios aspirantes. ¿Si sólo hay una candidatura es mal índice de democracia interna?

Apuesta por ser cercanos, "escuchar en qué hemos fallado y abrir una reflexión para la autocrítica". Otra frase manida que sólo aparece tras las derrotas electorales.

O dice que la agrupación local no está dividida, pero la percepción desde fuera ha conocido episodios que distan mucho de esa impresión idílica.

Leopoldo Sierra, Alcalde de Daimiel:

"El compromiso del PP con Castilla-La Mancha es mayor ahora que hace un año". ¿Cómo se come esto? ¿el compromiso depende de ostentar el poder, acaso? No, es que tira de una frase recurrente en los políticos que siempre pretenden estirar la palabra compromiso, que da mucho juego, como honestidad o sinceridad.

Y en cuanto al aniversario del triunfo otra afirmación llena de tópicos al uso, que gobernar pasa por "trabajar con mucha ilusión, por sacar a Daimiel de la difícil situación económica que atraviesa, estar unidos y, sobre todo, por mantener la humildad". Eso, ilusión, trabajo y humildad, palabras siempre en la boca política, aunque justa esta última, humildad, no es la que muchos ciudadanos atribuyen hoy en día al partido gobernante como tampoco era atribuible al anterior.


No sé, puede que de verdad lo sientan y lo crean, pero es que repiten tanto lo mismo todos ellos en las mismas circunstancias que suenan a catecismo político, a librillo de estilo de los partidos, a recopilación de frases hechas para cada ocasión política, y por eso, seguramente, nunca nos parecen demasiado creíbles.

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