jueves, 18 de agosto de 2011

CERRILISMO (Página nº 170)



Hace tiempo que me he ido desligando del futbol. Siendo mi pasión he ido marcando distancia porque, salvo algunso partidos dignos de ver, casi siempre encuentro medianía, forofismo, sublimación incomprensible de un deporte y bastante cerrilismo, incluso en los propios dirigentes y jugadores.

Partidos, sin embargo, como estos dos de la Supercopa entre Barça y Madrid, sí que me han hecho disfrutar del futbol en bastantes momentos, algo que sin embargo nada tiene que ver con el pre y postpartido, lamentable en todos sus ámbitos. Miras los foros, escuchas las entrevistas a pie de calle, oyes las declaraciones de los protagonistas - jugadores y entrenadores - o las patéticas tertulias de radio o televisión, y la mesura, la razón o el sentido común han sucumbido radicalmente al forofismo idiota, la visión sesgada, la malnutrición argumental y el frentismo ridículo. La objetividad ha muerto a manos de una ceguera estúpida e interesada en la que se entretiene una población ajena a los verdaderos problemas del mundo.

Nunca he oido tonterías más grandes que en torno al futbol, y aunque se dice que todos llevamos un entrenador dentro, que yo precisaría diciendo un pésimo entrenador dentro, lo cierto es que lo que de analítico y reflexivo nos pudiera suponer ese sosias pegado a nuestra piel queda eclipsado por el hooligans vocero e irreflexivo en que solemos convertirnos en determinadas ocasiones y que arruina cualquier intento de ser consecuentes y objetivos.

El partido de ayer, grandioso, igualado, sucumbió ,en parte, a detalles de falta de talento imbuidos por una crispación absurda que saca de sí incluso a jugadores más tibios y serenos, ¡qué decir entonces de aquellos otros que acelerados y violentos por costumbre revolucionan aún más su peor cara! y que deriva en episodios vergonzosos de unos y otros porque lo único que consiguen es exacerbar, aún más, no la rivalidad, que poco tiene de malo, sino el frentismo, el odio y el asco, que a nada bueno conduce.

Pero, claro, la máquina del dinero sigue girando y el periodismo ultra, cada vez más extendido, engrasa la maquinaria del enfrentamiento, endiosa aentrenadores y futbolistas menoscabando a los rivales y dando cancha a las cerriladas a las que nos acostumbran estos con sus declaraciones, mientras los clubs hacen caja a mayor enfrentamiento. Y la gente de la calle se deja llevar por esta deriva cerril aportando su granito de tópico y estupidez. Y tenemos futbol a todas horas aunque lo único salvable, y sólo a veces, son los noventa minutos en los que el balón anda en movimiento.




1 comentario:

  1. Frase del día

    En general, no nos basta con tener éxito; los demás deben fracasar.

    Maurice Saatchi 1946-?. Publicista británico.

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