Es bastante triste poner la tele y escuchar hablar de Castilla-La Mancha por noticias como ésta. Colapso en los pasillos de un hospital público mientras se cierran plantas. Es, más allá del ahorro y recorte, un desprecio al enfermo y su situación, al que mientras se le regatean recursos se le expone a unas condiciones que nadie querría para sí mismos y que, desde luego, jamás tendrán quienes toman esas decisiones.
No es la primera vez ni será la última, ni en Castilla-La Mancha el único sitio donde se podrá ver, porque ya hemos conocido imágenes así en otras comunidades, con gobiernos de otros colores, pero de nunca el mal de muchos puede ser consuelo de lo que vivimos aquí.
Particularmente no podría soportar ver a mi madre en esa situación, ni a ninguna persona con la que me ate algún vínculo afectivo, y por eso mismo tampoco deseo que nadie, por desconocidos y ajenos que sean para mí, pase por ese trance de verse aparcado en un pasillo mientras hay habitaciones cerradas en plantas o alas. En la enfermedad arrebatar esa básica dignidad de no tener que verse sometido al escrutinio de tanto ajeno por un pasillo, sentirse al menos arropado en un espacio no de tránsito, con los familiares cerca, con un mínimo de sitio donde vestirse y desvestirse, cambiar sondas, etc... es una exigencia moral para quien lo está pasando mal, para quien se siente dependiente ante su dolor y al menos agradece que se le trate con una elemental humanidad. Al menos, es seguro, no espera ese "maltrato" de verse orillado en un pasillo durante horas, días, en ese dantesco espectáculo de camas en batería esperando habitación.
Lo digo como lo siento, ver éste vídeo es desazonador estuviera localizado donde fuese, pero lo es aún más cuando lo reconocemos en nuestro propio servicio de salud regional, y el ahorro y el recorte no sirven para justificar algo así. No puede ser.
Las imágenes corresponden al Hospital Virgen de la Salud de Toledo, en el Servicio de Urgencias, y solo se explica por la falta de recursos materiales y de personal. Los enfermos nunca se ajustan al presupuesto, están allí contra su deseo que sería el de estar sanos, y ya no nos vale que se justifique como un hecho puntual si puntualmente sucede casi cada día de los últimos.
En Ciudad Real están igual. Es lo que tiene el neoliberalismo. Luego la gente o los vota, o los que los han votado ahora no quieren hacerlo siendo cómplices de todo esto igualmente.
ResponderEliminarEs lo que tiene pasar 3 años con fuertes dolores de cospedal. El año que viene vais y la votáis de nuevo, -si os atrevéis-, a ver qué tal.
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