Hablo del Azuer, sin duda este año el afluente del Guadiana de mejor comportamiento. Un pequeño río capaz de agigantar su presencia a poco que se den las condiciones favorables para que nos haga saber que no se ha ido, que a pesar de que su cauce natural haya intentado ser domado por máquinas y tractores y usurpado por los cultivos él sigue ahí, vital hasta para alimentar las Tablas de Daimiel e incluso, zanja por medio, revitalizar el seco cauce del gran hermano dirigiéndose a Zuacorta.
La historia reciente del Azuer ha sido así, el pequeño relegado a los intereses discutibles y queriendo ser doblegado por los hombres y el gigante que, puntualmente, se rebela para doblegar las intenciones humanas de devastarlo.
En estos días nuestro Azuer llena los ojos de los daimieleños, le contemplan admirados de su empuje, y logra que seamos muchos los que nos acerquemos a distintos puntos de su curso para contemplar su plenitud soberbia y poderosa, desbordante. Parece querer restañar esa otra imagen de escombrera y basurero en el que la infamia de algunos pretendían convertirlo aprovechando el cauce seco y se desboca para dejarnos claro que los ríos son eso, espacios para el agua que han labrado su propio cauce natural sin ayuda de los hombres y que así debería seguir siendo.
Ayer "faeton", participante en el foro de embalses, mostraba esta imagen creada por él sobre la situación del remonte del Azuer hacia Zuacorta que me parece interesante compartir. Me cuentan que si tal remonte no ha avanzado más se debe a que todo ese agua está siendo tragada por un ojo, lo que hace que este pequeño gran río esté alimentando directamente al acuífero, otra de sus hazañas a destacar.
¡Eres grande, pequeño!, ¡una bendición para esta tierra que desprecia las aguas someras y arrampla con las subterráneas, que no ha entendido tu riqueza sino la suya y por eso te ha maltratado, te ha despreciado, te ha desquiciado sin tú merecerlo!
¿Por qué Daimiel en el ámbito institucional no se ha sumado, ni harealizado un solo acto con motivo de "LA HORA DEL PLANETA"?
ResponderEliminar¿Tan difícil era disminuir la intensidad de la iluminación de algunas calles, apagar la iluminación ornamental de algún edificio o apagar algún edificio público?
Ya sospechábamos de la sensibilidad medioambiental de nuestros munícipes pero cada día que pasa se reafirman más en su inoperancia.
Lo de la hora del planeta me parece algo ilógico, apagamos un momento la iluminación y con eso ya hemos cumplido y luego el resto del año a gastar sin ton ni son
ResponderEliminarTanta importancia le dan algunos a apagar por un rato la luz, y lo suyo sería gastar menos pero todos los días,
Como decia en su día el eslogan que se difundió
"aunque usted pueda, España no puede"
La HORA DEL PLANETA como casi todo en la vida es un símbolo -la vida está llena de ellos- ( buena prueba de ello es la SEMANA que algunos se aprestan a vivir con intensidad)
Eliminary es un buen pretexto para empezar a sensibilizar, a concienciar y a informar a las nuevas generaciones sobre la importancia de cuidad y mimar a quien nos acoge.
Ningún gesto, por pequeño que sea, puede considerarse valdío.