INMUNDICIA MORAL O DEL VERTIDO EN NAVASECA (Página nº 1054)

Me niego a creer que a estas alturas una acción así se deba al desconocimiento o a la estupidez. Es imposible que después de tantos años alguien pueda escudarse en la falta de conocimiento no solo de las ordenanzas o leyes sino de que ya no vale cualquier sitio para desprenderse de una carga de escombros, basuras o cualquier tipo de residuo.


Aquí hay un problema real de falta de civismo, indecencia, sinvergonzonería, desaprensión, inmoralidad, canallada y delincuencia. Un caso evidente de indigencia moral, cívica y medioambiental. Una demostración de bajeza, envilecimiento, ruindad y vileza. La obra de un impresentable que piensa que todo vale.


Las actuaciones sobre los espacios públicos, y en especial sobre lugares que tienen, con sus condiciones, un cierto valor superior, deben ser controladas y reguladas incluso aunque hubiera en ellos hasta una intención no dañosa.


Tenemos una corresponsabilidad con la conservación de los espacios limpios, con evitar vertidos de cualquier tipo y preservar la naturaleza, y por eso, desde hace mucho tiempo existen lugares acotados para depositar escombros u otros residuos de los millones de toneladas que continuamente generamos.


Como dice el autor de la foto, José Antonio Alcazar, "mientras estamos hablando del uso de macrófitas para la mejora de nuestras aguas residuales en el entorno de Navaseca, hay desaprensivos que usan la zona para descargar escombros, con plásticos, latas, botellas, etc. como puede verse en la foto, tomada hoy en el camino trasero de la laguna de Navaseca." En tanto se plantean iniciativas que puedan mejorar las condiciones de nuestro entorno padecemos las acciones de estos desgraciados impresentables que desprecian el esfuerzo y el trabajo de los demás y sólo contribuyen a la convivencia con su desprecio y sus atentados medioambientales, seguramente porque les importamos una mierda y porque se amparan, como siempre, en la cierta seguridad que les otorga sentirse casi impunes por la falta de acción ante esos hechos.


Alguien me sugiere que lo mismo es una acción administrativa o de algún propietario colindante para evitar que el agua invada el camino. Hasta en ese caso, que lo dudo, me parecería inadmisible, parches poco aceptables y muy discutibles, porque nunca serían la solución pero tampoco una solución, y desandaría el esfuerzo hecho para ir mentalizándonos de que no todo vale.


Es necesaria denunciar esa bastardía, esa depravación, esa insanía que sólo hace daño.

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