Esta tarde alguien colgaba este comentario:
Mira Totem, hoy he visto parte de la historia que nunca nos cuentan:
"Españoles en los campos de exterminio, nombre a nombre, pueblo a pueblo."
http://www.cuartopoder.es/laespumadeldia/2015/04/05/espanoles-en-los-campos-de-exterminio-nombre-a-nombre-pueblo-a-pueblo/15804
Resulta que hubo cinco daimieleños que, además de sufrir el fascismo en casa, tuvieron la desgracia de acabar en campos de exterminio alemanes. Tres murieron allí, dos fueron liberados por los aliados."
"Españoles en los campos de exterminio, nombre a nombre, pueblo a pueblo."
http://www.cuartopoder.es/laespumadeldia/2015/04/05/espanoles-en-los-campos-de-exterminio-nombre-a-nombre-pueblo-a-pueblo/15804
Resulta que hubo cinco daimieleños que, además de sufrir el fascismo en casa, tuvieron la desgracia de acabar en campos de exterminio alemanes. Tres murieron allí, dos fueron liberados por los aliados."
Posiblemente la historia tiende a olvidar a las víctimas o reducirlas a un número, una cantidad, que permita asumir mejor o de manera más fría lo sucedido. Sabemos que fueron muchos las personas que escombraron con sus vidas todos esos episodios que narran lo peor de los seres humanos, gentes que nunca merecieron esos destinos y que ligaron su vida, voluntariamente o no, a esos episodios de guerra que han tachonado la historia de la humanidad para luego ser olvidados, como meros peones instrumentalizados por ambiciones con las que, en muchos casos, ni comulgaban.
Para ellos, en general, suele quedar la condena del olvido, cifras frías donde todas las vidas, motivaciones, deseos quedan arrumbadas para no ser tenidas en cuenta.
También hay gente que pelea por esa memoria, que recupera datos, que pone nombres y hasta rostros para batallar contra el olvido. Cuando no pensamos en cantidades sino en personas, en el impacto que debió producir en sus familias por saber o desconocer su suerte, las guerras, los crímenes, las aberraciones cometidas toman mayor gravedad y ya no pueden dejarnos indiferentes, aunque segura y desgraciadamente no puedan evitar nuevos conflictos armados y guerras donde otros muchos sigan muriendo sin ningún sentido.
En ese comentario se daba cuenta de cinco daimieleños que acabaron dando con sus huesos en campos de exterminio donde tres de ellos terminaron encontrando la muerte. Pero cinco es una cifra tan neutral que solo su condición de paisanos nos acerca más a su tragedia, y aún más el conocimiento de sus nombres y apellidos:
Hay muchos anónimos daimieleños que acabaron sus días en guerras donde se dirimían otras cosas más allá de sus propias motivaciones, gente de Daimiel que vieron truncadas sus vidas para pasar a ser estadística nada más y mucho dolor para sus familiares y allegados, y conviene recordarlos para no tener que volver nunca más a aportar nuevas víctimas entre los nuestros, para no tener que repetir errores ni sentir la impotencia de resolver con guerras lo que la propia guerra ya convierte en irresoluble y solo se decanta por la imposición de una fuerza sobre otra.
Mi suegro fue de la llamada "quinta del biberón", mi padre cumplió los dieciocho apenas tres semanas después de acabar la Guerra Civil y a punto ya de ser movilizado. Podían haber cambiado tantos las cosas con cualquiera de ellos víctimas de esa guerra si se hubiera prolongado que es más sencillo entender no las tragedias personales, que esas pertenecen a cada familia, sino la tragedia general que significa este sindiós que se baña de ideologías, odios y muertes y deja ese rastro de nombres que nunca deberían caer en el olvido ni la desmemoria.
***
A mi, personalmente, una víctima a causa del fascismo ya me parecería de más. Pero 10.000 deportados a los campos de exterminio me parecen una absoluta barbaridad criminal que sólo puede ser obra de asesinos dementes, independientemente de su ideología. Se nota la intención genocida a la legua: ¿qué pintaban los españoles demócratas y/o de izquierdas en un campo de exterminio alemán?
ResponderEliminarCinco personas no son, ni mucho menos, pocas atendiendo a la época y a la naturaleza del conflicto, en el que supuestamente España era neutral... porque recordemos que para entonces aquí se había acabado la guerra civil y supuestamente reinaba la paz (des)gracias a Franco.
Si sumas estas cosas a las fosas comunes que nunca se han querido dignificar aquí (mientras los medios se rasgan hoy las vestiduras por las fosas comunes del ISIS)...
...no parece desmemoria, si no el triunfo de la imposición fascista.
Cabe recordar la reciente sentencia de Naciones Unidas al respecto:
"España ni investiga, ni deja investigar violaciones de derechos humanos cometidas durante el franquismo"
http://www.nuevatribuna.es/articulo/espana/mecanismos-naciones-unidas-piden-espana-investigar-o-extraditar/20150328144718114217.html