Os voy a decir la verdad. Muchos de mis compañeros han bajado contando lo del terremoto. Algunos con cara de asombro, otros de sofoco, algunos más de inquietud, pero todos describiendo parecidos ruidos y efectos temblorosos. Los que en ese momento estábamos en la sala de profesores, apenas terminada la reunión de Ciclo, no nos hemos enterado de nada y les escuchábamos con cierto desconcierto, intentando discernir si había algo de cierto o era pura broma en los primeros que acudían junto a nosotros y entendiendo después lo que acababa de ocurrir.
Enseguida nos hemos remontado a lo sucedido en agosto de 2007, cuando el epicentro fue en Pedro Muñoz y entonces sí que lo noté perfectamente. y de pronto ese aluvión de noticias, fotos y bromas que los teléfonos devolvían a través del whatsapp.
Lo cierto es que en Daimiel, como en tantos otros sitios lejos del epicentro, todo quedará como anécdota, aunque me ha parecido curioso que todos recordasen qué estaban haciendo hace casi ocho años en aquel domingo de cierto sobresalto. Y es que, por leve, un terremoto es ese tipo de experiencia que te lleva a pensar cómo puede cambiar la vida en apenas unos segundos y el pánico terrible de aquellas personas que viven en su piel la intensidad de los grandes seísmo y las tragedias que en ellos se producen.
Daimiel ha temblado, como otras muchas localidades donde tenemos familiares y estos nos confirman haberlo notado. Somos demasiada poca cosa para algo así y solo consuela pensaR que todo ha quedado en un susto.
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ya no se hacen reuniones de Ciclo.jijijij
ResponderEliminarPues mira que sí aunque oficialmente sean de nivel, pero operativamente trabajamos todavía como ciclo al ser 5º LOMCE y 6º LOE
EliminarYo he setido panico!
ResponderEliminarHola con todo esto del terremoto y las llamadas a emergencias, y dada mi experiencia propia cuando alguna vez he tenido que llamar a emergencias:
ResponderEliminarCreo que sería necesario que desde los colegios, institutos... se deberían dar charlas sobre emergencias, y si nos encontramos ante alguna como llamar al 112, porque luego esto entre los nervios, la impotencia,... no somos capaces de reaccionar bien ante estas situaciones, y si no lo hubiesen contado antes lo tendríamos interiorizado y sería más fácil.
Incluso que te guíen en determinadas circunstancias como actuar, si tienes un temblor de unos segundos y no ocurren daños no hace falta llamar, que mucha gente llama, te vas a casa del vecino le preguntas y punto.
Bueno no se si es una rayada mía, pero creo que toda la información que nos puedan dar siempre es poca y nunca sobrará.