"EL AGUA DE LAS TABLAS SIGUE CONTAMINADA" (Página nº 2641)

Lo dice Santos Cirujano, investigador del CSIC y gran estudioso de nuestro parque nacional, un personaje que porque dice lo que dice empieza a ser tratado como los profesores granadinos que excavaron durante décadas la Motilla del Azuer, y es que no hay nada mejor que despreciar las opiniones desfavorables cuestionando a quienes las realizan.

Es más, Santos Cirujano dice "es un problema de cuenca" que en su opinión no quieren resolver. Y añade la información "desde que en 1989 se hizo el primer proyecto de seguimiento de las Tablas, refiere Cirujano, ya hablaban de que se iba a lograr el nivel de aguas pero no hablaban de la calidad y en estos ecosistemas "si cantidad y calidad no coinciden, el humedal no se recupera". 

Y aunque estamos ya en 2014 me temo que la calidad del agua sigue siendo un tema muy secundario para los gestores de la Confederación Hidrográfica del Guadiana y para el propio Ministerio de Medio Ambiente mientras no aparezcan brotes de botulismo o casos graves de contaminación, pues solo para entonces saldrían a darse golpes de pecho y a esbozar las buenísimas intenciones que venimos escuchando desde hace ya muchos, muchos, muchos años.

"El agua de Las Tablas sigue contaminada", se puede decir más fuerte pero no más claro, en palabras de quien sabe de lo que habla. Luego, quizá, salga nuestro concejal a desmentirlo o a decir que no le consta o a explicar que no es Daimiel el origen de esa contaminación. En cualquier caso mejor que sea así, que no tengamos que ver con esa responsabilidad contaminante, pero para el caso es lo mismo porque esté donde esté el origen de los vertidos o sustancias que producen esa situación, lo que se trata es de garantizar que las aguas aportadas al humedal protegido sean de la calidad necesaria para que nada lo altere y no estaría mal conseguir aumentar la superficie protegida desde los Ojos del Guadiana para conseguir que todavía sean más escrupulosos los controles desde el propio origen de las aguas kilómetros antes de llegar a Las Tablas de Daimiel, la referencia real de por qué conocen el nombre de nuestra ciudad por la mayoría de sitios de España.

La información aparece en la web de Radio Intereconomía y hace referencia a la situación general de los humedales españoles, en la cúspide de la destrucción y debido a la contaminación de los acuíferos y a que los usos del agua devuelven peor calidad de este líquido del que se ha recogido por ausencia de depuradoras, mal funcionamiento de estas o porque hay ayuntamientos que se comprometen a depurar un determinado volumen de agua y el resto no pasa por ellas, incluidas las recibidas por episodios de lluvia abundante, y que terminan destruyendo especies, modificando los espacios y deteriorando la calidad ambiental de los humedales,  que como dice el propio Cirujano, son "espacios considerados como los ecosistemas más ricos y productivos del planeta por su gran diversidad biológica."

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