domingo, 5 de julio de 2015

EL INDIVIDUO (Página nº 3216)

A veces los pueblos tienen la desgracia de tener, entre los suyos, gente que solo acompaña a su vida malestar, bronca, turbación, incomodidad, virulencia, vileza, provocación. Dejan un rastro áspero, estúpido, nocivo, tóxico, porque lejos de la discreción buscan irritar, enfrentarse, hostigar, incomodar a cuantos les rodea. No les importa siquiera una mirada o un gesto, no hace falta nada para que intenten meterte en su dinámica, convertirte en su objetivo, atraparte en su estúpida dinámica ofensiva.

En Daimiel, desde que recuerdo, tenemos uno de estos individuos al que esquivas y temes, al que repudias porque sabes que nunca puedes esperar nada bueno contigo. Salpican las denuncias, que nunca parecen suficientes, sobre su persona pero nada parece detener su rutina retadora. Conozco decenas de testimonios de personas que, en algún momento, han tenido algún encontronazo o incidente con el. He sido testigo reciente de algún hecho terminado en denuncia. Pero todo sigue igual, solo esperas no cruzártelo, esquivarlo si lo avistas con tiempo y no mucho más.

Ahora habrá quien diga que las historias personales pueden explicar los comportamientos, que todos, incluido él, somos víctimas de las circunstancias. No voy a discutirlo porque, en cualquier caso, no ayudará tampoco a resolver un problema enquistado en el día a día de Daimiel. Y la verdad, también me veo incapaz de dar con las soluciones posibles, que debe haberlas.

Lo que sí digo es que no es una anécdota, es un problema que ya ha tenido episodios desagradables y que apunta a ir a más. Incluso en la última rueda de prensa de la concejalía que atiende los asuntos de la Policía Local ya adquirió protagonismo haciéndose eco de lo que ahora yo describo. Tampoco pensé que llegara a tener hueco en este blog, ni que lo mereciera, pero varias circunstancias de las últimas semanas me han hecho escribir sobre esta persona y su forma de comportarse y no hay ninguna razón para tener que soportar sus modos como si nada pudiera hacerse para remediarlo ya que, entiendo, la convivencia ha de estar por encima de quienes la alteran y no la respetan.

Tampoco se trata de que ahora se pretenda hacer desde aquí un linchamiento social a partir de los comentarios sino señalar un problema de cierta gravedad, que es lo que debe importar, de ahí que prefiera haber prescindido de nombrarlo porque la entrada sería igual con cualquier otra persona en iguales circunstancias.


***

11 comentarios:

  1. El que os molesta a vosotros, cuando os molesta a vosotros. Porque el pueblo está lleno de individuos así, de toda la vida, y al que te refieres no es, ni de lejos, el más pernicioso ni el más violento de cuantos uno puede encontrarse...
    ¿Cansino? Más que la sopa del pueblo. Pero por lo menos tiene cierta gracia: ha dado anécdotas que se han convertido en leyendas urbanas y de ahí han saltado incluso a ser chistes de fama nacional. Va en serio...

    No se piensen que estoy defendiendo al "individuo", pero como persona que creció en los 80, rodeado de heroinómanos que se dejaban las jeringuillas en los parques infantiles, ladrones de casas de viejos o incluso asesinos (que con apenas 5 o 6 años "el Luna" intentó llevarme a su casa...) pues oigan... como que "el individuo" casi resulta anecdótico.

    Así que sinceramente: parece que lo os molesta, cuando os molesta. Porque tampoco vi un movimiento cívico en mi infancia contra "aquellos" personajes... ¿y ahora nos vamos a escandalizar por "estos"?

    ResponderEliminar
  2. Puede la sociedad hacer algo?

    ResponderEliminar
  3. CUIDADO!!!! Esta gentuza, cuenta con abogados, que hacen tratos con ellos, para sacar tajada de estos altercados. Que abogado puede defender a un personaje de estos? Para mi pierden todo su honor y prestigio!!!! Defender a una persona que finge atropellos.... POR DIOS!!!
    El caso es que sacan cuartos de los incidentes que ellos mismos provocan, asi que cuidadito con ellos y cruzate de cera... seras mas inteligente!

    ResponderEliminar
  4. Venga todo es problema de la sociedad, saquemos a los delincuentes de la cárcel, ellos no tienen culpa. La culpa es de la sociedad.

    El problema de este personaje es que no hay solución, habrá que esperar a que se le destroce el hígado, que al paso que lleva no será a mucho tardar.

    ResponderEliminar
  5. en daimiel hay personajes de traje y corbata muchos mas peligrosos que esta persona y que os cagais en referirlos.

    ResponderEliminar
  6. A todo aquel que vilipendia a alguna persona, que le rehusa, que le rechaza, que lo discrimina, que ....

    Yo le daría no un hijo, o un hermano o un familiar como la persona de la que ha dado inicio al comentario matriz, sino dos, así de esta forma tendrá por dos veces el sabor ingrato de saber como es la sociedad ya que en lugar de intentar ayudar a alguien lo rechaza, y lo desprecia.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues yo me encontre en mi casa, robandome, a uno de estos heroinomanos de los 80, una de estas victimas de la sociedad, otro famosillo del pueblo como al que va referida la entrada. Te aseguro que no es nada agradable.

      Eliminar
  7. Pues te emplazo a que visites el pretil de Santa Maria hasta la 1,30 ó 2 de la madrugada. Personajes los mismos de la calle Jesús. Creo que los demásque madrugamos tenemos derecho a descansar. La policía local:ni está ni se la espera.

    ResponderEliminar
  8. Me acuerdo de un movimiento que inició "El Borracho" (no me acuerdo del nombre, perdón) cuando regentaba el Bar Fondo Sur que pegó carteles por todo Daimiel que decía "Fuera capachas de Daimiel". Al menos, lo intentó.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El Movimiento Anticapacha. Aun tengo la camiseta

      Eliminar
    2. Sube la foto, que esto hay que ilustrarlo

      Eliminar